Analizo la rebelde indignación de Pedro de Quiroga, que pone en boca de los interlocutores de sus Coloquios de la verdad las certezas históricas, jurídicas y morales de la conquista, subrayando especialmente la peste catequética de los malos predicadores, que animalizan a sus oyentes, en lugar de cultivar su alma, de modo que, además de los trabajos forzosos de los indios, por su condición de quasi esclavitud, las prédicas de aquellos tampoco los liberan espiritualmente. Los predicadores son, así, la verdadera peste de América, una epidemia humana.
Abstract
Analizo la rebelde indignación de Pedro de Quiroga, que pone en boca de los interlocutores de sus Coloquios de la verdad las certezas históricas, jurídicas y morales de la conquista, subrayando especialmente la peste catequética de los malos predicadores, que animalizan a sus [...]