La biblioteca pública del siglo XXI se concibe como un centro social de y para la comunidad, centrada en la planificación y desarrollo de programas de intervención socioeducativa vinculados con la alfabetización, la participación y la integración social. El personal de las bibliotecas debe promover acciones que tiendan a reducir las desigualdades sociales, favoreciendo el acceso de todos los ciudadanos a la cultura, la información y la formación, siendo especialmente sensibles con aquellos colectivos más vulnerables. La complejidad de lo social hace necesaria la incorporación en las plantillas de especialistas formados en los procesos y las prácticas socioeducativas, así como la intervención en colectivos con necesidades especiales.
Published on 26/03/16
Accepted on 26/03/16
Submitted on 26/03/16
Volume 25, Issue 2, 2016
DOI: 10.3145/epi.2016.mar.09
Licence: CC BY-NC-SA license
Are you one of the authors of this document?