En algunos autos sacramentales de Calderón el personaje del Demonio idea la trama y plantea la acción dramática, actuando como un demiurgo. Traza planes y estratagemas para confundir al Hombre, pero fracasará siempre. Esta función acerca las obras al campo del metateatro. Se sugieren al final ciertos paralelos con Shakespeare.
Published on 13/02/14
Accepted on 13/02/14
Submitted on 13/02/14
Volume 2, Issue 1, 2014
DOI: 10.13035/H.2014.02.01.02
Licence: CC BY-NC-SA license
Are you one of the authors of this document?